viernes, 27 de enero de 2017

La loca de la escalera.

-Pues otra vez estaba sentada en el suelo del ascensor -dijo Doña Marta Palacios-, y he tenido que traer a Diez en brazos por la escalera.
-Joder, hay que hacer algo con esa mujer -dijo nuestro héroe-. Yo ya sabéis que subo siempre a pata, pero aquí hay señores mayores y otros impedidos que necesitan el ascensor.
-Y cada vez va a peor.

Clara era un mujer de mediana edad que vivía en la misma escalera que la familia Gordal Palacios. Hacía tiempo que daba señales de padecer alguna enfermedad mental, pero seguía pudiendo vivir sola. En os últimos tiempos, sin embargo, parecía ir a peor. Dos veces habían tenido que acudir familiares suyos a atenderla en crisis de nervios en los que había llegado a tirar del pelo e insultar a otra vecina, y parecía que los servicios sociales la tenían a su cargo. Pero ahora la última era que de vez en cuando se sentaba en el ascensor en el suelo y no dejaba que nadie lo utilizase. El único que parecía saber cómo convencerla era Pablo, el portero de casa. Cuando no estaba él se apoderaba del ascensor.

-Lo más gracioso -añadió Juan-, es que el otro día me dijo que se lo habían ordenado meterse allí, pero no fue capaz de explicarme quién.
-Ya, yo estaba allí -dijo nuestro protagonista-, le dijimos que ahora nosotros la decíamos que volviese a su casa pero no hubo manera.
-Sólo el portero parece saber cómo convencerla, habrá que decírselo.

Unos días más tarde, el señor Pablo logró una solución a medias: Clara en vez de en el ascensor se sentaba igual en el suelo, pero a la puerta de su piso. Como aquello coincidió con unas obras n la escalera, era un curioso espectáculo ver a los albañiles subir y bajar con sus cargas mientras la ignoraban.

-Joder, lo que pensarán esos hombres -dijo nuestro protagonista.
-No te creas, conozco gente que trabaja en eso, y saben que en cada casa suele haber un tarado.
-Pero esto tampoco es, deberían llevársela los servicios sociales.
-Sí, que luego salimos en el telediario cuando pase algo diciendo “se veía venir”.

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