domingo, 27 de mayo de 2018

Yo, el halcón.

-Pues es una película muy extraña -dijo nuestro protagonista-, pero sí me lo he pasado bien viéndola.
-Es una de padre e hijo extraña ¿verdad? -añadió Juan Gordal.
-Sí, y vamos a decirlo claro, no es la mejor, pero no sé, quizás por pintoresca me ha atrapado.

Yo, el halcón contaba la historia de un camionero que tuvo una relación con una mujer de mucho más alto status social que el suyo. Fruto de esa relación nación un hijo, al que su familia materna había predispuesto contra su padre, y que tenía en una burbuja ambiental de dinero y estudio en una escuela militar. Sin embargo, al caer la madre del niño enferma, el camionero se enfrenta a su familia y decide ganar dinero en el gran campeonato nacional de pulsos para conseguir los recursos que le permitan recuperar la custodia del hijo.

-No conocía ese ciruito de pulsos, es una cosa muy americana, la verdad -decía nuestro protagonista.
-Y es muy curioso cómo el padre se va ganando el respeto del niño.
-Bueno,m la clasificaré entre mis bodrios favoritos, porque objetivamente es mala y no hay grandes actuaciones, pero la historia atrapa.


Ficha de la película, aquí.

No hay comentarios:

Publicar un comentario