-¡¿Cómo que no tienes batería?! ¿Y ahora cómo nos comunicamos con Cárol?
-dijo histérico Juan Gordal.
-¡Joder, cómprate un móvil y controlas tú su carga! -dijo nuestro héroe.
-Siempre con lo mismo. No tienes ni reloj, ni móvil, ni camisetas... ¿y yo qué?
-Ya eres mayorcito, controla tú tu tiempo y tus actividades.
Una vez más Juan culpaba a los demás de que él no tuviese noción del tiempo
ni de sus actividades. Aquello solía sacar de quicio a nuestro héroe.
-El caso -dijo Juan-, es que no se puede contar contigo para nada. Eres un incompetente
de cojones.
-Por lo menos yo llevo mi parte, no como otros.
-Tienes razón, lo que voy a hacer es controlarte a todas horas. Si no, no podremos hacer nada.
-Claro, porque la posibilidad de que tú te ocupes de tus cositas no está ni contemplada, ¿no?.
-Cállate, aquí hay una tienda de cómics. Apunta esta calle en la agenda.
-¡Pero si no tengo batería!
-¿Lo ves? ¿Ves cómo eres un incompetente?
Fran memorizó la calle y el número de la tienda y se tragó las ganas de dar una bofetada a su
hermano. Al menos cuando llegase a casa tendría una dirección nueva.
No hay comentarios:
Publicar un comentario