—Bueno,
tenemos las uvas, el asado, los mariscos... —dijo nuestro
protagonista pasando revista en Nochevieja a sus víveres.
—Otro
año que se pira, y otra década —observó Juan Gordal
—No,
las décadas empiezan los años acabados en 1 —corrigió nuestro
hombre —. Ya me cobraron en mis primeros años de mayoría de edad
dos veces la fiesta de milenio para no saber eso.
—El
caso es que pasa el tiempo, y seguimos sin notar nada.
—Pues
raramente te lo digo, pero acuérdate, este va a ser mi gran año.
—¿Qué?
¿Tienes un plan para dominar el mundo o algo así?
Fran
comprendió que era difícil justificar en términos racionales su
optimismo, pero realmente , por alguna razón, tenía la corazonada
de que en 2020 todo le iba a ir bien. Que las siguientes navidades
serían en mejores condiciones que las que se estaban celebrando, que
ese año redondo traería algún cambio.
—Fran,
tú nunca has sido de cosas esotéricas de esas, dímelo. ¿Qué te
traes entre manos?
—Nada
que no sepas, iré a oposiciones, buscaré trabajos, intentaré
ponerme en forma...
—¿No
tienes ningún motivo pero dices que va a pasar algo?
—Sí,
en serio lo creo.
Intentando
aún nuestro protagonista explicar a qué se debía ese optimismo,
hizo su aparición Doña Marta Palacios y habló de planes para la
cena.
—....Yahepuestouncorderoparaquecenemosperonosésiponerlosturronesamediatardeodespuésdela
cenacómocreéisquequedarámejordesdeluegonoséyocómocasarlosperoesnecesarioquelostomemosy
estoslangostinosteníanmuybuenapinta...
—Mamá
— inquirió Juan Gordal —. ¿Qué esta Fran tramando que no me
quiere decir?
—Ayhijoyoqueséperoporquénovaatenerilusiónenelnuevoañomiraloimportanteesesperartodoscon
alegríayojalátodoshubieratenidotuhermanoesasensaciónamímegustavoyallamaratodoslosquehayque
felicitarelaño...
—Eso, feliz
2020 a todos. Peero me quedo pensativo —dijo Juan.
—Pues no
pienses y disfruta, que va a ser buen año —remató nuestro héroe.
No hay comentarios:
Publicar un comentario