Aquel
día, nuestro héroe se quedó dormido hasta bien entrada la mañana.
No había dormido bien, y en ausencia de más horarios que los que él
se impusiera, sin facultad ni de momento trabajo, era lógico. Al
despertarse encontró unas notas escritas por Doña Marta Palacios:
“Queridos
hijos. Me tengo que ir rápido, pero me ha dado tiempo a dejaros unos
espárragos cocidos y unas gambas. En la nevera tenéis huevos y
podéis hacer un revuelto. Yo no sé si hoy vendré porque tengo que
poner dos exámenes e igual me quedo pensándolos.
Vuestra
anciana madre.”
De
modo que nuestro protagonista repasó el tomo de oposiciones,
escribió algo por el ordenador, y a la hora de la comida fue a
despertar a Juan. Este tuvo una idea que cambió los planes de Doña
Marta:
-Me
parece que si los picas puedes hacer una pasta muy buena si le añades
pimiento y cebolla rehogada.
-Bueno,
sí, pero habrá que traer la pasta que no tenemos.
-Vale,
si me das algo de pasta traigo jamón o algo más para echar.
Con
todos estos ingredientes quedó, como los hermanos habían supuesto,
una pasta muy apetecible. Pero Doña Marta al llegar tuvo una
reacción muy suya:
-Ayhijoscómoseosocurreestonosehahechojamásloquehayquehacercongambasyespárragosesrevuelto
lapastasehaceconotrascosascomojamónosalchichasestonosehavistonunca...
-Joder,
ya salió la innovadora -dijo Fran.
-Echate
un poco de esto, mamá -dijo Óscar alargando un bote de salsa de
soja.
-Yencimaesopararematarconlopocoquemegustaesasalsaestámuyfuertelahechasentodosinisiquierael
jamónesjamónqueesunfiambrerarodeesosqueosgustanavosotrosconloricoqueestáelrevuelto...
-Lo
siento, mamá, tendríamos que haber supuesto que a tí no te gusta
nada que te saquen de tu idea inicial
-Buenohijostampocopasanadaperoestonosehacomidoasíenlavidayloteníaistodoparahacerun
buenrevueltoyvaisyponéisesto...
-Vámonos
con Diez, Juan, ya se le pasará.
Pero
cuando llegó la cena aún seguía Doña Marta con la misma retahíla:
-Buenohijosahorahehechopescadomenosmalporqueloquehaabéishechoestmañanaeraterribleconlo
ricoqueestáelrevueltoyváisyosponéissojaencimaquemataelsabordetodoyestáfortísimaconlofácilque
eshacerlaascosascomoDiosmanda...
-Te
lo dije Juan, va a estar así varios días.
-No
creo que tanto.
Pero
cuando al día siguiente nuestro protagonista se levantó encontró
otra nota:
“Hijotes:
hoy os he dejado un pollo. Podéis servirlo con ensalada o traer unas
patatas. Por favor, no hagáis experimentos con él. Está muy bueno
como siempre se ha tomado.”
-Joder,
la próxim vez que mamá diga que hagamos aalgo, te sugiero que
sigamos el plan, Juan.
-Pero
la pasta estaba buena ¿no?
-No
es ése el problema. La cosa es que mamá no quiere. A ver si le
hacemos caso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario