sábado, 18 de julio de 2020

¿Moda? ¿Imposición? ¿Y qué hago yo siguiéndola?


⸺4.95 euros.
 ⸺Tenga. Es reutilizable ¿no?
 ⸺Hasta cierto punto. Tenemos muchas más, con muchos motivos y personajes...
 ⸺Sí, ya veo, pero los gorilas me parecen bien.

 Si solo seis meses antes le hubieran dicho a Fran que iba a estar mirando mascarillas de protección sanitaria como si fueran una prenda más de ropa, y decidiendo cuál tenía el dibujo más agradable seguramente hubiera mandado a quien se lo dijera a paseo. Pero sí, la pandemia que había recluido a la tercera parte de los habitantes de su planeta en sus casa y amenazaba con volver a hacerlo en amplias zonas de su país había convertido un instrumento de protección de la salud en un complemento más. Fran había empezado llevando mascarillas quirúrgicas, primero porque confiaba más en ellas, y segundo, porque le parecías ridículo banalizar así una medida de protección de la salud. Se había resistido a usar las de tela, pero viendo la cantidad de basura que se producía desechando las quirúrgicas, basura peligrosa, además, se tuvo que rendir a esta nueva ¿moda?. Las había de todos los modelos y con todos los motivos imaginables: que remitían a la máscara de Darth Vader de su querida Guerra de las Galaxias, con ositos rosas y más pequeñas para los críos, con motivos políticos poco recomendables para cierto sector de descerebrados e incluso Fran había observado que en ciertas zonas de su ciudad donde se asentaba una importante población inmigrante, los africanos solían usarlas con motivos tribales. Nuestro personaje llegaba a  sonreír, olvidando a ratos la situación de aquellas pobres mujeres, pensando que las musulmanas de familias integristas no debían notar diferencias con si niqab habitual. Y en el suelo revoloteaba una página ajada de una revista, que debía ser de moda, hablando del fenómeno del «covid chic», el cursi nombre que habían puesto en París al  hecho de que los grandes modistos estuvieran desarrollando ejemplares de este material que lucieran bien.  Fran pensaba en lo extraño y banal de todo esto cuando dos señoras muy empingorotadas de las que lucían en sus trapitos faciales los símbolos políticos antes mencionados hablaban en estos términos del epidemiólogo que estaba intentando coordinar como podía la emergencia sanitaria:



 ⸺Pues ir a ese homenaje, porque ya ni siquiera se puede decir funeral, con esa mascarilla de dibujitos es para meterlo en la cárcel ⸺gritaba la de la bandera sobre fondo militar.
 ⸺A ellos y a quienes han puesto donde está al sepulturero ⸺respondía la del aguilucho.

 Joder, cómo se ha banalizado esto, pensó para su interior Fran, que ya es hasta motivo de cárcel para algunos. Bueno, mis gorilas lucen muy chulos. A ver si pillo otras. Las hay del Atleti, de varias películas...

No hay comentarios:

Publicar un comentario